La importancia de mantener un orden en todo

Desde pequeños nos enseñan que debemos mantener todo en orden, desde nuestros juguetes, hasta la ropa y enseres de estudio. ¿Cuántas veces hemos escuchado decir a nuestros padres: “ordena tu cuarto”?. Pues muchas y no lo hacen por fastidiar o porque quieren tener un pretexto para que no salgamos, sino por nuestro propio bien.

Ciertamente la única forma de que las cosas funcionen es a través del orden. Recuerdo que mi profesora de lengua una vez dijo “el sistema digestivo es un conjunto de órganos ordenados que cumplen determinadas funciones” e hizo un fuete énfasis en la palabra “ordenados” debido a que nos hablaba de las jerarquías de las palabras en una oración, como ves hasta en el habla mantenemos un orden para colocar cada palabra detrás de la otra.

De hecho, mantener un orden siempre es difícil, sobre todo por la flojera de colocar las cosas en su lugar, pues pensamos que si éstas se quedan ahí un par de horas o días no pasará nada del otro mundo. Lo malo, es que ésto no pasa con uno o 2 objetos de la habitación, sino con varios y al pasar de los días todo se convierte en un caos mucho más difícil de solucionar.

Cuando la habitación esta completamente desordenada nos da aún más flojera y nos rehusamos a hacerlo apelando a que no tenemos tiempo, pues debemos estudiar y hacer trabajos. El problema de esto es que cada vez que buscamos algo, nos demoramos demasiado en encontrarlo o, peor aún, nunca lo hacemos, lo cual nos pone de mal humor y, qué irónico, nos hace perder más tiempo.

Respecto a esto, recuerdo un capítulo de Sabrina, la bruja adolescente en la que ella se imagiba cómo sería su vida si viviera con su tía más desordenada y veía que por culpa de todo ese caos perdía una oportunidad de trabajo importante y hasta una propuesta de matrimonio.

Mantener en orden nuestras cosas no es un juego, sino una obligación que tenemos con nosotros mismos. De esta forma aprenderemos la importancia de la organización y la limpieza, valores muy importantes que nos serán de mucha utilidad cuando busquemos y obtengamos un empleo en el futuro (no sólo para conservarlo, sino para mantener nuestras cuentas y vidas en orden).

Si no te gusta pensar mucho en el fututo, míralo desde este ángulo: mantener nuestras cosas en orden nos permite encontrarlas a tiempo, tener un espacio en el cual podamos hacer entrar a nuestras visitas sin la vergüenza de mostrarles el desorden en el que vivimos y nos da la oportunidad de depurar cosas que ya no nos sirven.